El Gran Canaria cae por inanición
El grupo de Pedro Martínez sucumbe (68-56) ante la asfixiante defensa del Valencia Basket y los numerosos errores en ataque. Nelson, con 15 puntos, destacado
24.03.2013 | 02:10 LA PROVINCIA
Agencias
El Herbalife Gran Canaria cayó ayer por inanición ante el Valencia
Basket (68-56), que asfixió con su defensa al conjunto de Pedro
Martínez, que pese a su inicio esperanzador cedió por completo en la
segunda parte del compromiso de la jornada 26 de la Liga Endesa. El
equipo taronja, una auténtica bestia negra para los amarillos, que ya
sucumbieron en la semifinal de la Copa del Rey celebrada en Vitoria,
sumó una victoria que le permite despegarse del conjunto insular en la
lucha por la cuarta plaza de la clasificación ACB.
El equipo de Perasovic acumula ya tres triunfos consecutivos en Liga, y su trayectoria le sitúa, junto a Uxue Bilbao y Barcelona Regal, al acecho de la plazas altas de la clasificación. Por su parte, el Gran Canaria observa cómo se estrechan las distancias con sus perseguidores, tras completar su cuarto partido consecutivo a domicilio sin victorias. Desde el duelo en Fuenlabrada no palpa el triunfo.
El quinteto grancanario dominó los primeros minutos del encuentro con rentas interesantes en el luminoso de la Fuente de San Luis, pero los anfitriones lograron activar su defensa, adelantaron su línea de presión y ahogaron progresivamente a su rival hasta maniatarle y cerrar su triunfo en la segunda parte, gracias a las canastas fáciles en transición que logró tras sus muchas recuperaciones.
El Gran Canaria saltó a la pista liberado, con la mente limpia y sin pensar en el pasado más reciente. Los exteriores de Pedro Martínez, con especial mención para Brad Newley en su regreso a la Fonteta, superaban con descaro a sus defensores en el uno contra uno, lo que propició canastas sencillas cerca del aro, bien de los penetradores o bien de los interiores (6-17, minuto 6). El juego era fluido para los amarillos, que miraban con descaro al aro rival y aprovechaban la falta de Faverani para percutir por dentro con interesante frecuencia anotadora.
La segunda falta personal de Xavi Rey, que le llevó al banquillo, y el descanso de Newley dejó sin referencias a los visitantes, justo cuando la rotación de Velimir Perasovic activó la defensa local, una combinación que igualó el choque en pocos minutos (19-19, minuto 10). Ahí empezó el drama para los amarillos.
Un par de triples de Thomas Kelati sellaron la remontada y obligaron a abrirse a la defensa visitante, lo que facilitó las penetraciones del Valencia, multiplicó las faltas personales insulares y permitió a los anfitriones, quienes alimentaron su marcador desde la línea de tiros libres, llegar al descanso con el choque controlado (39-32, minuto 20).
El Valencia regresó a la pista dispuesto a no complicarse el partido. Adelantó su línea defensiva y ahogó por completó los ataques de un Gran Canaria que pagó su falta de agresividad en la circulación con cinco pérdidas de balón con sus correspondientes canastas fáciles para los locales.
Las diferencias, aunque nunca por encima de los diez puntos, permitieron a los de La Fonteta aparcar los nervios y centrarse única y exclusivamente en hacer su partido. El mismo que les había llevado a ganar dos veces con anterioridad esta temporada al equipo isleño y que ya empezó a disparar la renta al comienzo del último acto.
Fue el principio del fin para el Herbalife Gran Canaria, que una y otra vez cayó en las trampas defensivas locales -14 recuperaciones- que llevaron a los locales a más canastas fáciles. Por si fuera poco, el pique de Markovic con Bellas motivó todavía más al base serbio, que firmó uno de sus mejores partidos con la elástica taronja.
El equipo de Perasovic acumula ya tres triunfos consecutivos en Liga, y su trayectoria le sitúa, junto a Uxue Bilbao y Barcelona Regal, al acecho de la plazas altas de la clasificación. Por su parte, el Gran Canaria observa cómo se estrechan las distancias con sus perseguidores, tras completar su cuarto partido consecutivo a domicilio sin victorias. Desde el duelo en Fuenlabrada no palpa el triunfo.
El quinteto grancanario dominó los primeros minutos del encuentro con rentas interesantes en el luminoso de la Fuente de San Luis, pero los anfitriones lograron activar su defensa, adelantaron su línea de presión y ahogaron progresivamente a su rival hasta maniatarle y cerrar su triunfo en la segunda parte, gracias a las canastas fáciles en transición que logró tras sus muchas recuperaciones.
El Gran Canaria saltó a la pista liberado, con la mente limpia y sin pensar en el pasado más reciente. Los exteriores de Pedro Martínez, con especial mención para Brad Newley en su regreso a la Fonteta, superaban con descaro a sus defensores en el uno contra uno, lo que propició canastas sencillas cerca del aro, bien de los penetradores o bien de los interiores (6-17, minuto 6). El juego era fluido para los amarillos, que miraban con descaro al aro rival y aprovechaban la falta de Faverani para percutir por dentro con interesante frecuencia anotadora.
La segunda falta personal de Xavi Rey, que le llevó al banquillo, y el descanso de Newley dejó sin referencias a los visitantes, justo cuando la rotación de Velimir Perasovic activó la defensa local, una combinación que igualó el choque en pocos minutos (19-19, minuto 10). Ahí empezó el drama para los amarillos.
Un par de triples de Thomas Kelati sellaron la remontada y obligaron a abrirse a la defensa visitante, lo que facilitó las penetraciones del Valencia, multiplicó las faltas personales insulares y permitió a los anfitriones, quienes alimentaron su marcador desde la línea de tiros libres, llegar al descanso con el choque controlado (39-32, minuto 20).
El Valencia regresó a la pista dispuesto a no complicarse el partido. Adelantó su línea defensiva y ahogó por completó los ataques de un Gran Canaria que pagó su falta de agresividad en la circulación con cinco pérdidas de balón con sus correspondientes canastas fáciles para los locales.
Las diferencias, aunque nunca por encima de los diez puntos, permitieron a los de La Fonteta aparcar los nervios y centrarse única y exclusivamente en hacer su partido. El mismo que les había llevado a ganar dos veces con anterioridad esta temporada al equipo isleño y que ya empezó a disparar la renta al comienzo del último acto.
Fue el principio del fin para el Herbalife Gran Canaria, que una y otra vez cayó en las trampas defensivas locales -14 recuperaciones- que llevaron a los locales a más canastas fáciles. Por si fuera poco, el pique de Markovic con Bellas motivó todavía más al base serbio, que firmó uno de sus mejores partidos con la elástica taronja.
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